Mientras Valsequillo 'se derrumba', el alcalde niega la importancia del movimiento vecinal

 

En el municipio de Valsequillo, la actuación del grupo de gobierno consiste en esperar a que las cosas sucedan. La prevención de riesgos no está entre las prioridades del alcalde y la seguridad de los vecinos, tampoco.

 

Todo esto contrasta con el esmero y dedicación que ponen siempre en la preparación de fiestas y eventos, como estrategia prioritaria en la búsqueda del voto de bajo coste.

 

La semana pasada estuvieron preparando la fiesta del grupo ASBA con una semana de antelación, utilizando personal y material municipal, algo ilegal y denunciable. Paralelamente, no prestaron una mínima atención a la ordenación del tráfico en los tramos cortados en la carrtera GC-41 para intentar minimizar los problemas que planteaban los comerciantes y vecinos de la parte alta del municipio.

 

La celebración de la fiesta anual del partido del gobierno tuvo absoluta prioridad y ante la cadena de errores producida por la falta de dedicacion y previsión a los problemas reales y urgentes, el alcalde intentó atajar sus efectos desde el mismo lunes, solicitando la inmediata presencia en Valsequillo del Consejero de Vías y Obras del Cabildo, el Sr. Augusto Hidalgo, con el único objeto de proyectar sobre él toda la responsabilidad del caos y la desorganización denunciado por los vecinos, de manera prioritaria en todo lo referente a la gestión del tráfico de vehículos.  Para el sr. Francisco Atta, los culpables son siempre otros. Esta vez, también. 

 

Es cierto que el Cabildo es el responsable del Mantenimiento y Conservación de las carreteras insulares y, de hecho, están permanentemente controlando y reforzando aquellos sitios que van mostrando indicios de derrumbe inminente. En la GC-810, solo en los últimos años se han hecho hasta 6 actuaciones importantes para evitar derrumbes, y otro par de actuaciones más han sido para levantar varios muros de contención de cierta envergadura en la zona del Valle de San Roque.

 

Sin embargo, el discurso de la confusión, en que todo lo que pasa es "culpa del Cabildo", está dejando en evidencia, día tras día y fiesta tras fiesta, al sr.Atta.

 

El caos y el desbarajuste que se creó anoche en varias vías de acceso al municipio como consecuencia de otro derrumbe "inesperado", ponen al descubierto una vez más la ineptitud del alcalde y su grupo de gobierno. Actuaron tarde y mal, como ya es habitual, y las medidas adoptadas solo consiguieron empeorar la situación como consecuencia de la improvisación, el desconocimiento y la ineptitud vergonzante del concejal de Tráfico, sr. Gregorio Peñate, así como a la falta de un plan de actuación en situaciones de emergencias de este tipo.

 

Alguien podría calificarnos de oportunista por criticar a los responsables del desastre organizativo, pero los hechos están ahí. Son situaciones que se repiten, hechos objetivos y en imágenes.  Este mismo fin de semana ha habido manifestaciones de colectivos en lucha, pero el gobierno, en vez de escuchar, organiza una fiesta y publica su gran éxito en la prensa. Lamentablemente, sus notas de prensa van por un lado y la realidad va por otro, pero es un asunto que ni siquiera entramos a valorar. Las imágenes ya lo dicen todo.

 

Las fiestas es el pan de cada día en este municipio y, en muchas ocasiones, sirven de parapeto al alcalde. El pasado sábado, sin ir más lejos, el alcalde se escondió entre los suyos ante la presencia de un centenar de vecinos que protestaban ante las dependencias municipales por unas demandas justas y razonables; a pesar de estar avisado, no quiso escuchar a los vecinos, una prueba más de cómo trata a su pueblo el sr. Francisco Atta.

 

Otra argucia habitual es culpar a la oposición y a otros estamentos de sus errores; esta vez también culpó al Cabildo de los problemas de tráfico en el municipio, recurriendo a su victimismo endémico y a la ofensiva mediática a toda plana.

 

El despliegue del sr. alcalde en la prensa insular este pasado fin de semana responde a la situación crítica por la que está pasando. Nunca estuvo tan presionado por la opinión pública local y ello le está llevando a intentar minimizar daños de cualquier manera y a lavar su imagen más allá de los límites del municipio. Don Teodoro Sosa y don Oscar Hernández, entre otros, seguro que están mirando con cierta perplejidad lo que acontece por Valsequillo. La imagen que Fco. Atta está transmitiendo resulta penosa.

 

En esta nueva ofensiva mediatica vuelve a centrar sus críticas en la oposición pero con la única y exclusiva de intención de restar importancia e ignorar el efecto que el movimiento vecinal está generando y que la Plataforma Vecinal "San Roque en lucha" está reactivando en todos los barrios del municipio. El efecto dominó es imparable y el sr. Atta no sabe cómo neutralizar esta ola de protestas que, según los organizadoes, tan solo acaba de empezar.

 

El cansancio y el hartazgo está haciendo mella en el ánimo de los vecinos y manifestarse es un modo de responder a la ineficacia de un alcalde muy cuestionado y de un gobierno  tremendamente debilitado, que está actuando a contracorriente y desoyendo sistemáticamente lo que piden sus vecinos.

 

Ciento siete (107) personas, contadas, ni una más ni una menos, representando a todos los rincones del municipio y manifestándose pacíficamente, han demostrado tener mucha más fuerza y apoyos que unos actos fallidos organizados por un gobierno sin ideas y sin rumbo.

 

Pero, señores, el sr Francisco Atta lo tiene claro: mientras el municipio se cae a pedazos, "que siga la fiesta".

Ya buscarán a quien echarle la culpa de todo lo negativo que vaya sucediendo.

 

La Plataforma Vecinal "San Roque en lucha", confirma que la semana próxima, atendiendo a la agenda del sr. Consejero, serán recibidos en las oficinas del Cabildo Insular por D. Augusto Hidalgo, Consejero de Vías y Obras, para atender las demandas de los representantes vecinales y valorar sus propuestas.