Valsequillo celebra la declaración de su Rancho de Ánimas como Bien de Interés Cultura

El alcalde del Ayuntamiento de Valsequillo, Francisco Atta, el concejal de Cultura de la institución municipal, José Juan Pérez y el ranchero mayor del Rancho de Ánimas de Valsequillo, Agustín Calderín, estuvieron este viernes en la emisora municipal para hablar del decreto aprobado por el Consejo de Gobierno por el que se declara Bien de Interés Cultural a los Ranchos de Ánimas de Gran Canaria, los de Arbejales-Teror, La Aldea y Valsequillo, como bien inmaterial de esta isla.

“Muy contento y orgulloso, porque todo lo que sea bueno para el Rancho bienvenido sea”, ha dicho Agustín Calderín en la emisora municipal. Una noticia que como ha dicho el alcalde de Valsequillo “es un paso fundamental para darle la importancia que se merecen e intentar que permanezca como patrimonio inmaterial de nuestra historia y costumbres. Sin duda, es una gran noticia que ya adelanto celebraremos con un acto que ya estamos preparando con otras instituciones”.  Por su parte, el concejal de Cultura, José Juan Pérez, también ha celebrado esta “gran noticia que reconoce la labor de aquellos que aún mantienen vivo el Rancho y de los que han formado parte de él a lo largo de su historia”.

El proceso burocrático ha sido largo, iniciado en 2017 por los ayuntamientos que aún conservaban sus ranchos que con esta declaración blindan la tradición y la protegen de posibles influencias que la alejen de su origen tan cercano a otros tiempos y a otros mundos. Una noticia que ha sido muy celebrada en el municipio, de hecho, la Cronista Oficial de Valsequillo de Gran Canaria y presidenta de la La Asociación de Patrimonio Cultural de Valsequillo de Gran Canaria, María Teresa Cabrera, expresaba a través de la radio municipal, “el Rancho de Ánimas es una manifestación única de nuestra acervo popular y un vínculo con nuestro pasado. Su declaración como BIC es un paso fundamental para preservar esta tradición y asegurar que siga viva en el corazón de nuestro pueblo”.

Los Ranchos de Ánimas siguen siendo una manifestación cultural única que cumple varios siglos de existencia, siendo la manifestación más antigua del folclore canario. Su calendario de salidas está fijado y regido por el calendario de celebraciones cristianas, entre principios de diciembre, aproximadamente en la festividad de Santa Lucía y se extiende hasta el día de la Candelaria.